jueves, 30 de junio de 2011

LA TORRE DE BABEL IV




Intuyo, porque no puedo saberlo todo, que el resto de los personajes o personas, según ellos, que conforman esta pintoresca historia, recibieron también un telegrama parecido en la parte del mundo donde se encontraran en ese momento. Milarepa iba recibiendo llamadas en su monte, conforme el sobresalto de los telegrafiados se hacía evidente. Su don telepático y otros poderes mentales, igualmente efectivos, le permitieron saber la personalidad y pensamientos de esas personas, a quienes conocería muy pronto. Eso era algo que Milarepa sabía muy bien. Cuando en el futuro conocería a persona concreta o entidad personal, alguien llamaba a la puerta de su mente –toc-toc- entonces él abría y allí estaba la persona desconocida, con sus pensamientos y sentimientos, de momento ajenos a su memoria y a su corazón, pero que con el tiempo formarían parte de su vida, aunque fuera solo un momento. Le sucedía desde que era muy jovencito, casi un niño, y su maestro, el lama Remposé, le había advertido que eso era algo natural en las personas evolucionadas. Su mente se adelanta al futuro y así pueden conocer antes de tiempo a quienes acabarán cruzándose en su camino antes o después.
Este era el caso de un tal doctor Sun, discípulo de Jung, quien tras una azarosa vida había recalado en el Hotel de los disparates, primero, y allí fue reclutado por un millonario excéntrico para dirigir como psiquiatra y jefe médico la dirección de la desconocida clínica mental, llamada Crazyworld, cuya historia se narra en otra parte.
El telegrama lo recibió el doctor Sun a bordo del crucero “Alegre pandilla”, solo que en inglés, un idioma que desconozco y no me voy a poner a hora a buscar en Google su traducción al inglés. A mí me lo dijeron en español y así queda. Dicho crucero estaba lleno de locos, de locos millonarios, claro, porque los locos normales nunca van en crucero. No es mi función explicar las razones, quiero que simplemente sepan que tras los asesinatos cometidos en Crazyworld, el millonario dueño del sanatorio y de la finca decidió embarcar a todos los pacientes en un crucero de lujo, para dar la vuelta al mundo, mientras se amortiguaba el escándalo generado por el conocimiento de un sanatorio mental para millonarios locos del que nadie había oído hablar, que no pagaba impuestos y no estaba registrado en ningún organismo público.
Me disculparán que me ahorre el trabajo incordiante de citar a todas las personas que fueron recibiendo el mentado telegrama a lo largo y ancho de las horas de dicho día y días subsiguientes y concomitantes. A lo largo de esta narración, larga como un día sin pan, y tan surrealista y real como la historia del propio Don Quijote, que escribiera Cervantes, irán conociendo a todos ellos, con su perfil sucinto y sus prolijas biografías no autorizadas, por supuesto, que aparecerían tiempo después en los archivos secretos de la nueva sociedad o holding internacional que se creara a raíz de que todos ellos entraran en posesión de la donación del millonario Slictik, quien exigió que sin la creación de una fundación sin ánimo de lucro, par ayudar a todas y cada una de las necesidades globalizadas de nuestro mundo ni el holding sería posible ni entraría nadie en posesión de los millones de dólares donados. Menos mal que el Sr. Aladro, abogadro y copartícipe en el holding, encontró la fórmula de hacer compatible la existencia de la nueva sociedad, de la fundación y de la evasión o tergiversación o ahorro de impuestos.
Debo decir, antes de que cualquier lector despistado se pregunte por mis fuentes de datos, si son fidedignas o no, que tuve acceso a las biografías no autorizadas de estos personajes, así como a otros papeles sellados con el muy conocido sello de “top-secret”, e incluso a documentos antiguos que se consideraban perdidos y de los que solo hablaré si es necesario. Y todo ello gracias a mi aventura sentimental con Maribél, la superconocida top modél. Me disculparán por sacar a la luz pública algo que debería permanecer en el ámbito más privado e íntimo de cada persona, pero cómo me iban a creer ustedes sino identificara mi fuente. El resto es pura debilidad humana. ¿Cómo podría yo vencer la tentación de anunciar a bombo y platillo, percusión y orquesta, una aventura erótica que muchos, todos, o bueno, casi todos, hubieran dado los ahorros de su vida y hasta una pierna o brazo o incluso la cabeza, que para poco sirve en estos tiempos, si con ello hubieran logrado acostarse con la mujer más bella, esplendorosa, sensual, piramidal, de curvas más potentes, la más “buenorra” y “macizorra” de toda la historia humana después de Marilyn Monroe. Y que me perdonen las feministas, si quieren, y sino que no lo hagan, pero es la verdad, la pura verdad y no me arrepiento de lo dicho.